Marisa Nolasco
Sebastián a quien llamaban ‘Chachito’ de 14 años de edad, hacía mandados para apoyar económicamente con los gastos en casa, hasta que dos empleados de una panadería en Durango lo mataron al estilo del juego de la ruleta rusa.
El menor llegó a una panadería donde habitualmente lo ocupaban para hacer mandados, ahí estaba Dante quien era el encargado del local e Isaac, un empleado.
DANTE
El encargado de la panadería ordenó a Isaac que agarrara al niño quien por cierto, tenía problemas del habla. Una vez sometido Dante tomó un revolver calibre 38 y le metió un cartucho.
A Sebastián ‘Chachito’ lo pusieron contra la pared y mientras Isaac lo inmovilizaba, Dante le puso la pistola en el corazón, jaló el gatillo tres veces, pero, en la cuarta ocasión, la bala atravesó al pequeño.
ISAAC
Uriel, encargado de la caja de la panadería, tomó entre sus brazos al niño y lo llevó a un hospital cercano donde le dijeron que ya no tenía signos vitales.
Dante escapó del lugar y se presume que se refugia en Texas. Mientras que a Isaac y Uriel, la policía los detuvo por la muerte del pequeño.
Sebastián era conocido como ‘Chachito’, pues pese a los problemas que tenía para hablar, desde los ocho años hacia mandados y se ganaba unas monedas para contribuir en casa con los gastos.
Uriel declaró cómo ocurrió el crimen y a pesar de no estar involucrado, está detenido presuntamente porque en la panadería había drogas y armas.
