Ángeles y Camotes
El pasado lunes 21 de abril se llevó a cabo una nueva audiencia sobre el caso Zavala – Monzón, en la que quedó más que claro que la Fiscalía, entonces manejada de manera caprichosa por Miguel Barbosa, fabricó una historia para vengarse de Javier López Zavala. Los motivos son de sobra conocidos.
En dicha audiencia, dos testigos de cargo (presentados por la parte acusadora) fueron pieza clave para entender que todo lo que las autoridades dijeron sobre el asesinato de Ceci Monzón fue una obra montada por los propios investigadores bajo las órdenes del ex gobernador y desde luego, del entonces Fiscal, Gilberto Higuera.
SEGÚN LA FISCALÍA, Silvestre N. y Jair N. se reunían en un Auto Hotel en Totimehuacán para planear el atentado en contra de Monzón, sin embargo, esa versión se desploma de manera sorprendente cuando la testigo presentada el pasado 21 de abril, aseguró que ella misma se encargaba de registrar todas las entradas y salidas de las personas, pero, no vio a Jair ni a Silvestre, incluso comenta que el día del asesinato ella no trabajó por lo que no pudo haber visto a una persona de playera blanca con gorra de NY como lo describieron los “investigadores”
Vaya escándalo del que seremos testigos cuando se quite el alfiler que sostiene la enorme farsa que nos vendió la Fiscalía de Higuera.
Resulta que tanto la testigo Cecilia como el testigo Juan, coincidieron en algo que, a usted lector, le va a sorprender.
Ambos testigos fueron recogidos en la ciudad de Puebla por un Agente del Ministerio Público de nombre Tonatiuh Gutiérrez quien en un VEHÍCULO OFICIAL, trasladó a los testigos instruyendo como tenían que rendir su declaración, una situación que dejó en claro en esa audiencia ante el Tribunal del juicio que a los señalados les pusieron un chaleco a la medida para salvar a los VERDADEROS RESPONSABLES.
Cuando el señor nos llevaba en un auto oficial, al penal de Cholula, nos enseñó una fotografía y nos dijo que lo teníamos que señalar, pero la verdad es que nunca hemos visto a esa persona de la fotografía (Silvestre N)
Vaya declaración de los testigos.
Es importante señalar que el Abogado defensor preguntó a los dos testigos si la persona que les había mostrado la fotografía para incriminar a Silvestre N. se encontraba en la sala de audiencia, a lo que ambos dijeron que si, señalando a Tonatiuh Gutiérrez, empleado del entonces Fiscal Gilberto Higuera.
A todo esto, se suman las inconsistencias e ilegalidades antes comentadas en este medio, tal como la declaración de un Agente del Ministerio Público en la que termina aceptando que Jair N. SI FUE TORTURADO para culparse.
Pues sepa usted lector, que a Jair N. mientras lo golpeaban los agentes ministeriales, le mostraban videos en los que se veía como su esposa e hija eran golpeadas, eso como método de presión para aceptar que estuvo relacionado en el crimen de la Abogada Cecilia Monzón.
Es importante conocer a detalle todo lo que ha ocurrido en este caso evidentemente montado por la Fiscalía de Gilberto Higuera bajo las órdenes del entonces Gobernador Barbosa quien utilizó a la fiscalía para satisfacer sus rencores personales.
Mientras tanto, no ha habido una sola prueba que demuestra la responsabilidad de Jair N. ni de López Zavala en el crimen, ¿Bastan los dichos de la Fiscalía para mantener presas a personas aún sin pruebas de sus participación en algún delito?
Es el México del famoso “Ya se puede ir, usted disculpe”
Sería bueno, necesario, que la Fiscal Idamis Pastor, revise los videos de las audiencias que se han celebrado, en todas encontrara que absolutamente todos los testigos llevados por la parte acusadora van desmoronando la versión de la Fiscalía, una versión que nos vendieron para taparle el ojo al macho mientras los asesinos de la activista siguen haciendo de las suyas.